Estamos a punto de terminar el año y no puedo hacerlo de otro modo que dando unas enormes gracias a todos los que habéis obrado que 2012 en
La Regalina ha sido un buen año por el simple hecho de que no sólo seguimos adelante, sino que nos hemos mantenido respecto a 2011. Por eso, quiero dar las gracias especialmente a:
Nuestros clientes. Sois nuestra razón de ser y nuestro objetivo último consiste en que seáis felices los días que pasáis entre nosotros. Las encuestas y opiniones este año han sido muy buenas, no voy a caer en la falsa modestia, es cierto que cada año trabajamos para que todo sea y funcione mejor que el anterior, pero también habéis tenido la paciencia suficiente en los días punta del año, cuando a veces no llegamos a todo lo que deberíamos llegar y se producen pequeños errores, que suelen ser muy bien encajados por los clientes.
Las personas que trabajáis en La Regalina, por todo el amor y la profesionalidad que ponéis a vuestro trabajo, porque cada año trabajáis mejor que el anterior, nunca olvidáis que nuestros clientes son nuestros huéspedes y hacéis que vuestro trabajo bien hecho y el trato personal sea uno de los valores más apreciados de La Regalina. Las encuestas son claras: los dos elementos más valorados son el trato del personal y el paisaje. El segundo nos lo dio Dios, el primero es sólamente obra vuestra.
De una manera especial, quiero mencionar al equipo de limpieza, de manera especial Marisol y Mary, que han tenido un año muy sacrificado, con más reservas más cortas, y cumplieron con gran profesionalidad y, a pesar del agobio de muchos días del verano, sin perder la sonrisa ni el buen humor.
Los proveedores externos, que forman una parte esencial de nuestro engranaje para que siempre haya gasoil en los depósitos, las instalaciones estén bien mantenidas, el césped y los setos en su punto, que el 15 de agosto no nos falten sábanas, que el 24 de diciembre por la noche nos arreglan una caldera que se ha parado o una tubería que se ha roto.
Los seguidores via web, Blogalina,
Facebook,
Twitter, Foursquare... todo aquello que hace que seamos más visibles en el mundo virtual, que es por el que se entra al mundo real. Este año vamos a cerrarlo con más de 200.000 visitas a nuestras distintas páginas web en diferentes espacios. Tan sólo un cuarto de ellas son pagadas (publicidad), el resto es orgánico, contenido que se visita en la red gracias a vuestras aportaciones, comentarios, menciones, compartidos, links, etc.....
Y finalmente, la gratitud y el recuerdo a seis personas que ya no están con nosotros, que gracias a las cuales este proyecto maravilloso es como es:
Mary Tere Ramos y su marido, Ricardo Pichardo.
Mary Tere era la anterior propietaria mayoritaria de Los Campos. Amiga, de familia amiga de generaciones, casada con una persona sumamente inteligente, Rafael, hicieron muy fácil lo que a priori era complicado. Los días que pasamos junto a ellos en Santo Domingo RD para cerrar el acuerdo los recordamos con mucho cariño. A pesar de tener 50 años de diferencia entre nosotros y ellos, Tere y Rafael fueron muy jóvenes siempre. Se fueron los dos muy poco tiempo después y casi uno detrás de otro. Estoy seguro que donde estén seguirán organizando los lunes una "open party".
Mi tío abuelo Gregorio Avello, Yoyo.
Filósofo y poeta, según rezaba en sus tarjetas de visita. Todo un Avello, un gran personaje que yo conocí por los pelos, pero que le dio tiempo a enseñarme las letras. La nueva lavandería la financiamos con las acciones de Telefónica que nos dejó.
Mi tío Juan Gutiérrez.
La Regalina empezó en 1978, en un momento sumamente complicado para la familia y para el país, con un capital de unos cuatro millones de pesetas, dos de ellos se los prestó a mi padre mi tio Juan, sin intereses ni plazo de devolución, "cuando puedas". Años después nos enteramos de que él había tenido que pedirlos prestados al banco, con los intereses terribles que se llevaban en la época. Juan fue providencial para La Regalina en sus inicios, su presencia en ese preciso momento fue un auténtico "match point".
Mi madre, Inés Avello.
Auténtica inspiradora de La Regalina y persona de hospitalidad exquisita. Nos dejó a principios de este año pero ella nos sigue ayudando y permanece en todo. Esta es la primera Navidad que no está físicamente con nosotros, pero sí lo está, más que nunca, en nuestros corazones.
Feliz Navidad y muchísimas gracias a todos.
